Con mucho colorido, cohetes, risas, familia y mujeres defensoras de derechos humanos, se llevó a cabo la gran fiesta popular y la instalación de un memorial dedicado a Manuela para reivindicar que ella siempre fue inocente.
Esta fiesta popular se llevó a cabo en la Plaza principal de Cacaopera y organizado por las organizaciones litigantes, Agrupación Ciudadana por la Despenalización del Aborto, el Centro de Derechos Reproductivos y la Colectiva Feminista para el Desarrollo Local, buscando dignificar a su madre, padre e hijos de Manuela y así hacer un reconocimiento público a María Edis (verdadero nombre de Manuela).
Declaraciones de Morena Herrera, sobre la Sentencia de Manuela
«El Estado Salvadoreño perdió la oportunidad de restablecer la imagen de esta mujer y ahora con todas estas personas que estamos aquí, vamos a contribuir a restablecer su memoria, ya el más alto tribunal de las Américas lo ha reconocido, la Corte Interamericana de Derechos humanos ha dicho que Manuela es inocente, no cometió ningún delito y se le violaron sus derechos», enfatizó Morena Herrera.
Edward Peréz, Aboga del Centro de Derechos Reproductivos expreso, «el caso de Manuela representa un mandato para toda la región, no pueden criminalizar a cualquier persona por acceder a un servicio de salud» además agregó, «Manuela se volvió justicia y esperanza para todas aquellas personas que injustamente están siendo perseguidas por cualquier asunto que este relacionado con su salud reproductiva».
La artista salvadoreña Claudia Flores fue la que diseño el memorial de Manuela, tomando como inspiración la figura femenina, la balanza que representa la justicia, el ave que hace alusión a la esperanza y las flores blancas que simboliza un nuevo comienzo.
Este es un memorial en el que organizaciones de derechos humanos asumen y reconocen la lucha por la justicia de Manuela, reivindicando su memoria y acompañando a la familia, en donde la lucha por la justicia no ha sido en vano, esta lucha ha abierto caminos para otras mujeres.
Con la Fiesta Popular organizaciones defensoras de derechos humanos, mujeres organizadas y la familia de Manuela toman el espacio público para resignificarlo y recordarle a la sociedad que no solo es Manuela, que hay más mujeres que están siendo criminalizadas por emergencias obstétricas y que ninguna mujer debe pasar por que un día pasó María Edis (Manuela).
Manuela siempre fue inocente y por eso diferentes organizaciones de Derechos Humanos seguirán en la búsqueda de la justicia contribuyendo con cambios en políticas públicas que garanticen el acceso a la salud, la integridad y dignidad de todas las mujeres para que no se vuelva a repetir la historia de Manuela.