CONVENIO: “Contribuir a la gobernabilidad y seguridad democrática desde la promoción y la defensa de los derechos humanos de la población joven para contribuir a la reducción de las desigualdades sociales, de género y a la promoción de la cohesión social, El Salvador.” financiado por la AECID.
Las 6 socias del Convenio trabajarán en el fortalecimiento de las organizaciones de mujeres y hombres jóvenes rurales de los departamentos de Chalatenango, La Paz, La Libertad y Usulután para la defensa y ejercicio de sus derechos, con especial atención al derecho a una vida libre de violencias y en el fortalecimiento de las capacidades de incidencia de las organizaciones de jóvenes ante las municipalidades para la territorialización del marco jurídico desde un enfoque de derechos, intergeneracional y de género.
El fortalecimiento de las capacidades de los/las jóvenes en general y de los lideres y de las lideresas de grupos y organizaciones juveniles se trabajará en tres niveles: Proceso de formación en empoderamiento para la defensa y vigilancia de los derechos de las juventudes a nivel municipal dirigido a jóvenes en general de los 4 departamentos, en total participarán 360 jóvenes, 90 por departamentos
Proceso de formación en liderazgo a nivel intermunicipal, dirigido a 160 jóvenes lideres y lideresas de los 4 departamentos con enfoque de DD.HH, de género, feminista, diversidades y ambiente sano. Se espera la elaboración de agendas políticas a negociar con las redes nacionales y resto de redes y organizaciones juveniles y de adultos/as.
Formación en Liderazgo a nivel Interdepartamental, con la participación de 120 líderes y lideresas, al finalizar el proceso además de haber fortalecido las organizaciones juveniles se contará con una agenda consensuada entre los 4 departamentos.
Todos los contenidos transversalizarán el enfoque basado en derechos, el enfoque feminista, cultural, intergeneracional y de ambiente sano.
Se crearán espacios seguros en los municipios priorizados, para hacer frente a la demanda de los titulares de derechos a lo largo de los talleres que se han llevado a cabo para la elaboración del diagnostico y de la Línea de base, han manifestado la necesidad de contar con espacios seguros, no solo por los niveles de violencias e inseguridad con los que cuenta el país sino porque las juventudes sobre todo en el ámbito rural no cuentan con espacios seguros donde poder llevar acabo vida organizativa.
Los espacios contarán con una gestión ambiental de las instalaciones, manejo de residuos, ahorro y reciclaje y formación en uso de tecnologías limpias
Una vez fortalecidas las capacidades de las juventudes y elaboradas las agendas y propuestas para la territorialización del marco normativo que afecta al Convenio, se incidirá en las municipalidades y en las instancias nacionales para que se incluyan a los/as jóvenes en los espacios de representatividad para que puedan posicionar sus agendas y participar en la toma de decisiones.
Un eje fundamental será el fortalecimiento del trabajo en redes y plataformas facilitando cauces de participación para fortalecer la institucionalidad democrática desde un EBDH.
En todas las estrategias se promoverá la creatividad y expresión artística desde las culturas juveniles, el respeto a las diversidades y al medio ambiente. Para visibilizar el derecho a una vida libre de violencias se pondrán en marcha campañas y se participará en las fechas conmemorativas claves a lo largo de los 4 años.