El pasado, 11 de mayo se realizaron dos audiencias, una en el Tribunal de Sentencia de Sonsonate por el caso de Flor Arely Sánchez Paiz y la otra en Tribunal Tercero de Sentencia del Centro Judicial Isidro Menéndez por el caso de María Teresa, dos mujeres que enfrentaron complicaciones obstétricas y fueron encarceladas injustamente.
María Teresa estuvo presente en la revisión de sentencia que solicitaron sus defensores legales y las organizaciones que la han estado apoyando para que pueda salir en libertad.
María Teresa es una mujer pobre, su madre emigro a los Estado Unidos y hasta el momento no la ha vuelto a ver, su padre, como en la mayoría de casos, no se hizo cargo de ella, fue hasta los nueve años que vivió con su abuela materna, luego vivió con su madrina y finalizo en una Aldea infantil.
Adulta comenzó a trabajar en diferentes empresas y fue madre de un niño que actualmente tiene nueve años.
En el 2011 trabajo en una maquila de confección y tuvo complicaciones de salud, teniendo sangrados vaginales continuos, en ese momento ella paso consulta y le diagnosticaron infección en la vejiga. En noviembre del 2011, ella se encontraba en su casa y tuvo ganas de defecar y fue a su letrina, su suegra la encontró (con quien vivía en ese momento) desmayada en un charco de sangre, como cualquier otra persona preocupada, pidió auxilio y fue trasladada al Hospital del Instituto del Seguro Social (ISSS) para que la atendieran.
Fue en ese centro médico donde comienza su calvario y a sufrir una infinidad de injusticias y violaciones a sus derechos humanos.
María Teresa fue denunciada por el personal médico que la entendió, la acusaron de aborto y posteriormente la enviaron a bartolinas de la Policía Nacional Civil (PNC).
Teresa declaro que no sabía que estaba embarazada, tenía continuos sangrados vaginales y su vientre no creció, familiares y compañeros de trabajo manifestaron no haberla visto embarazada, pues nunca se le noto.
En noviembre del 2011 fue condena a 40 años de prisión por el delito de homicidio agravado por la muerte de la criatura gestante, a pesar de no comprobarse que hubiera realizado ninguna acción para provocarse un aborto
La fiscalía y el Juez no escucharon las declaraciones de Teresa y fue acusada en base a una falta de comprensión del problema obstétrico que sufrió. Nadie declaró que Teresa realizará alguna acción intencional que llevará a la muerte la criatura por lo tanto ha sido condenada sin pruebas directas.
Revisión de sentencia
El caso de María Teresa paso a una Revisión de sentencia, con el objetivo que el Juez Licenciado Martín Rogel Zepeda del Tribunal Tercero de Sentencia corrigiera el error Judicial y pusiera en libertad a María Teresa
La revisión de sentencia fue suspendida y se reprogramó para el próximo 20 de mayo, por la falta de asistencia del Doctor Ramírez de Medicina Legal, perito de la Fiscalía.
Organizaciones internacionales y nacionales, defensoras de derechos humanos, dijeron estarán atentas a esta resolución, para que María Teresa salga en libertad y pueda seguir con su proyecto de vida y estar junto a su hijo.
Caso Flor Arely Sánchez Paiz
Arely es una mujer de 35 años de edad, es una mujer pobre y no tuvo acceso de ir a la escuela, fue madre por primera vez a los 15 años, tiene 5 hijos y pertenece al departamento de Sonsonate.
En el 2015 a inicios del mes de julio Arely sufrió una emergencia obstétrica, tres días antes presentó calentura y molestias y se había reservado comentarles a sus familiares y amigos que estaba embarazada, fue al río a bañarse para ver si de esta manera le hacía sentir mejor, regresando a su casa se le presento la complicación obstétrica y tuvo un parto precipitado, ella sintió que se le salió algo y en ese momento se desmayó. Quedo tirada en un maizal, su hijo mayor la encontró tirada e inconsciente, como pudo la cargo hasta la casa, y buscaron un medio de transporte para llevarla a la unidad de salud y de ahí la trasladaron al Hospital Nacional Dr. Jorge Mazzini de la ciudad de Sonsonate, encontrándose en estado de coma.
En ese mismo día encontraron a una criatura recién nacida abandonada y lo informaron a la PNC, aún tenía su cordón umbilical necrosado y muchas dificultades de respiración.
Fueron inicialmente a la Unidad de Salud donde les informaron que Flor Arely había ingresado por un aborto y que estaba ingresada en el Hospital Nacional de Sonsonate.
Flor Arely había ingresado al Hospital aún en estado de coma, llego la policía y la esposaron a la cama del Hospital, acusándola del delito de aborto consentido y propio.
A esta mujer la acusaron de haberse provocado un aborto, aunque lo que tuvo fue un parto prematuro precipitado que le ocurrió en el campo.
Se realizó audiencia inicial en el Juzgado de Paz de Izalco. La Fiscalía General de la Republica, cambio la tipificación inicial del delito de aborto consentido y propio a homicidio agravado.
Después de una audiencia inicial, una audiencia preliminar de la etapa de instrucción y una vista pública realizada ayer en el Tribunal de Sentencia del Departamento de Sonsonate, el Juez determinó una resolución de absolución para Arely, quedando libre de medidas sustitutivas y teniendo libertad absoluta para que continúe su proyecto de vida junto sus hijos, familia y amigos.
Fueron 10 meses que el sistema de justicia la privó de libertad, coartándole el derecho a poder estar con sus hijos y la posibilidad de desarrollarse laboralmente, exigiéndolo a pagar una condena que no había cometido.
La defensa legal de Arely estuvo a cargo del Abogado Dennis Stanley Muñoz y la Abogada Elsa Daniela Ramos.
Esta es una lucha continua por parte de las organizaciones de mujeres, feministas y defensoras de derechos humanos, para que otras mujeres no sigan siendo acusadas, por tener problemas obstétricos y condenadas por el delito de aborto, cambiándoles la tipificación a homicidio agravado e imponiendo penas de hasta 40 años de prisión como en el caso de María Teresa