Lesbofobia, abuso de autoridad y brutalidad policial contra dos mujeres lesbianas en Santa Ana.

Comunicado de prensa

San Salvador, 17 de septiembre de 2020. El 6 de febrero del presente año, Valentina de 30 años y Fernanda de 26 fueron victimas del abuso de poder, detención arbitraria, tortura y lesbofobia por parte de dos agentes policiales en la Ciudad de Santa Ana.

El 6 de febrero ellas regresaban de una cena alrededor de las 10 de la noche cuando fueron interceptadas por vigilantes de la residencial en la que habitan, aludiendo que ellas levantaban mucho la voz, las detuvieron y llamaron a la policía; sin argumentos y razones fueron sometidas con brutalidad policial y bajo la complicidad de los vigilantes las golpearon hasta casi perder el conocimiento.

“ Los agentes llegaron y dijeron: qué pasa con estas putas, nosotras notamos que nos querian hacer daños” comenta Valentina. Ella les aclaró que eran pareja con Fernanda, que no pasaba nada,  pero ellos se acercaron con tono amenazante, cuando Fernanda vió la actitud de los policías les advirtió que no podían hacerles nada porque ellas conocían sus derechos, pero los policias abusando de su autoridad las esposaron, tiraron al suelo y la golpearon, después las subieron a la patrulla sin decirles a dónde las llevaban.

“Creí que nos iban a matar o desaparecer,  nos dolía tanto ver que la otra era abusada de esa forma, pero ninguna podía hacer nada, solo gritamos que nos dejaran, pero nuestras súplicas no fueron escuchadas, pese a que los vigilantes de la colonia vieron todo, no hicieron nada” Fernanda.

Ambas fueron llevadas a Bartolinas,  donde fueron torturadas: “nos tiraron a un piso de grava y nos siguieron golpeando en las costillas y la cara, nos tiraron agua sucia y helada, nos obligaron a hincarnos como pidiéndoles perdón, después nos ordenaron que nos paráramos y nos esposaron a un poste, era ya de madrugada y hacía frío” .

Después las trasladaron a la Delegación 911, ahí fueron encerradas sin saber por qué estaban ahí, tampoco tuvieron acceso a una llamada, su familia no sabía dónde estaban, por tanto no recibieron comida, aunque algunas veces las mismas presas compartieron con ellas.

El 11 de febrero salieron de la Delegación 911 a audiencia inicial, ahí supieron que uno de los agentes las denunciaba por resistencia al arresto y lesiones. La jueza sobreseyó a Fernanda y el proceso continúa con Valentina. Es decir, ellos agredieron a las jóvenes y posteriormente las denunciaron. La audiencia contra Valentina se realizará el 21 de septiembre en Santa Ana. 

El equipo de occidente de la Colectiva Feminista para el Desarrollo Local conoció el caso y delegó al equipo jurídico para dar acompañamiento, la primera acción fue  pedir medidas de protección para salvaguarar la vida de las jovenes, debido a la persucución y amaneza que sienten de parte de los agentes policiales.

Es importante evidenciar las garantías procesales que se violaron en el caso de estas jóvenes, derecho a la defensa, derecho a la seguridad e integridad física, además de los procedimientos que se violaron en el arresto por parte de los policías, actos arbitrarios, lesiones y privación de libertad por agente de autoridad o autoridad pública.

En medio de estas acciones represivas se han presentado acciones judiciales, se ha interpuesto una demanda en la Fiscalía General de la República, oficinas de Santa Ana en contra de los agentes policiales por los delitos de lesiones, tortura, actos arbritarios y privación de libertad. 

Ponemos en evidencia el abuso de poder que elementos de la PNC ejercen en contra de mujeres jóvenes y cómo pretenden usar el sistema de justicia para quedar impune y castigar a las víctimas. ¡Valentina y Fernanda son inocentes!